Cada vez es más habitual que tanto pequeños como no tan jóvenes abran perfiles en las redes sociales. A ello se le suma el hecho de que las mismas se han convertido en una fuente de ingresos para las pequeñas y medianas empresas, quienes muestran su empeño y buen quehacer en sus perfiles. Esto supone, inevitablemente, que el número de usuarios aumente casi a diario. Y el número de hackers y spammers, también.
Por ello, aunque estar ahí es fácil, hay que hacerlo con cierta seguridad. Según Microsoft, existen algunos consejos básicos que pueden disminuir los riesgos que corremos al compartir fotos, vídeos y mensajes. ¡Te los descubrimos!
– Cuidado con los vínculos: Antes de hacer click en un link que vea o le llegue, asegúrese de que no es un gancho. La fuente de procedencia puede ser un buen indicador. Un paso en falso puede ser el abismo a un fraude. ¡Ojo!
– Las publicaciones, bajo lupa: A veces somos nosotros mismos los que nos metemos en la boca del lobo y, sin querer, ponemos en bandeja cosas que nos pueden hacer mucho daño. Por ejemplo, ¿para qué necesita un hacker trabajar si continuamente publicamos fotos de nuestro perro y la respuesta al ‘olvidó su contraseña’ es su nombre o nuestro día de cumple, en el que todos nos felicitan en el muro?
– Ante cualquier invitación, pregunta por otra vía: Continuamente nos llegan invitaciones para otras redes o eventos con enlaces por parte de nuestros amigos. STOP! Si queremos asegurarnos de que todo está correcto, tenemos otras vías para preguntarle si esa invitación es real o producto de alguna infiltración en su cuenta. Un whatsapp para saberlo no cuesta nada y evitará males mayores.
– El correo, para lo justo y necesario: No compartir nuestra libreta de direcciones de correo electrónico con las redes en las que nos registramos evitará comprometer a nuestros amigos revelando sus cuentas. Con esto acabaremos con los envíos masivos de invitaciones y publicidad «por nuestra culpa».
– Inicie sesión siempre desde el explorador: Cuando te apetezca publicar algo en tu muro, ve directamente al website de la red solicitada. Acceder desde un correo o una página que aparezca en buscadores puede acabar en problemas de suplantación de identidad, ya que muchos hackers se ocultan tras páginas con apariencias falsas.
– ¿Qué es un amigo?: En Internet se suele cometer el error de abrirnos públicamente a cualquier persona que se nos cruce. Aceptar a cualquiera conlleva demasiadas complicaciones. Se selectivo.
– Para siempre: por mucho que en un futuro puedas irte de la red social, borrar la huella que dejamos en internet es demasiado complicado. Cualquier persona puede hacerse con nuestros datos, nuestras fotos y vídeos. La garantía de «borrarnos» para siempre es nula, se consciente.
– Naturalidad: y ante todo y como consejo estrella, ¡se natural!. Va a ser prácticamente inevitable que tus hijos se abran un perfil y compartan en él experiencias con sus amigos en ellos. ¿Para qué ocultarlos? Habla sin miedo de lo que aquí pasa y cómo deben hacer para que no se convierta en un problema.