Se acabó el escribir, publicar y etiquetar, diciendo que ‘nos sentimos felices’. Ahora tendremos un pequeño editor de texto en nuestras manos, para hacer publicaciones más curradas.
Pero no nos creamos que es el paraíso para los escritores con ojo de diseño gráfico; las funciones son limitadas y, por lo pronto, ‘sólo’ podemos añadir una foto de portada, un título, cambiar el tamaño de las fotos y situar las mismas en lados diferentes.
Según cuenta el propio Facebook en su blog -claro que ellos tienen-, ahora podremos «expresar nuestra opinión se explica en el blog oficial de Facebook, “Ahora puedes expresar sobre algo que viste en las noticias o escribir una carta abierta que desea compartir con el mundo. Puedes compartir una receta especial con una lista con viñetas de ingredientes y fotos de cada paso”.
Otro de los objetivos, destaca el equipo de Zuckerberg, es que los usuarios puedan compartir sus opiniones de una manera mucho más personal, para así llegar a sus familiares y amigos de una manera más adecuada a su personalidad.